Tomado de: La Prensa Gráfica
por Rafael Macal
La canasta básica salvadoreña ha reportado un incremento de $4, al comparar los precios del primer semestre de 2009 con el del año 2010, reveló hoy la Defensoría del Consumidor (DC), tras realizar un sondeo de 32 alimentos básicos que se venden en supermercados y mercados del país.
El precio de la canasta básica era $28.96 al 15 de junio de 2009. Al 17 de junio de 2010, el valor ahora es de $33.05,
Esto se traduce en un incremento de $4.09 que los salvadoreños deben pagar para adquirir los productos de la canasta básica.
Los productos que se identificó han subido más de precio son algunas verduras que aumentaron a partir de noviembre de 2009 con la tormenta Ida; y el producto que más ha bajado es el frijol. El detalle de precios también aplica para la venta de productos por los mayoristas.
Como medida para tener una mayor vigilancia sobre los productos que se venden en los supermercados, la DC pidió a las principales cadenas de supermercados información sobre volúmenes, precio de compra y venta al consumidor final de los productos de consumo básico.
Asimismo informaron que se le solicitó la misma información a 31 empresas comercializadoras de granos básicos, pero sólo 18 fueron atendidos. Los 13 restantes incurrieron en una infracción considerada como “muy grave” y que está contemplada en el artículo 44 de la Ley de Protección al Consumidor.
1 comentario:
Me llama mucho la atención esta noticia; a veces suele atribuirse casi por dogma la variación de los precios hacia las fluctuaciones en la cantidad de dinero pero estos son en verdad un fenómeno multicausal que depende de otros factores, algunos sin duda estocásticos.
Estos factores pueden ser: la inflación importada, expectativas de los agentes económicos, perturbaciones de oferta y de demanda, desastres medioambientales, etc.
Por otra parte será siempre la inflación un aspecto negativo? la respuesta es no, solo cuando es muy elevada al grado de afectar la competitividad de las exportaciones e impacte hacia un deterioro considerable de los salarios reales; sin embargo debe existir variaciones en precios para incentivar la oferta.
En períodos de estancamiento tiende a presentarse deflación, la cual es muy negativa para la dinámica económica; sin embargo cuando existe recuperación es de esperarse que los precios tiendan a crecer un poco.
Es por esto que la inflación reflejada puede ser un buen síntoma si existe predominancia de una reactivación económica en relación al impacto generado por el huracán Ida.
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